Dicen que la distancia y el amor son dos bloques totalmente incompatibles, pero ¿por qué? No hacen falta cientos de kilómetros para sentirte lejos de la persona a la que amas, o necesitas, esa persona que te haga sentir especial, sea tu pareja, tu amiga, tu familia... A veces, tienes a una persona tan cerca, pero a la vez tan lejos, que ni sabes como acercarte a ella, y otras, tienes a una persona en la distancia que la sientes como si te susurrara al oído. Pero a veces todo esto cambia, la distancia y el amor es muy relativo, porque todo puede tornarse al contrario, y a veces decepciona, porque te haces la ilusión de que esa persona que tienes a lo lejos, la vas a conservar para mucho tiempo, y que a la que tienes cerca, la perderás, a pesar de poder verla cuando te plazca, pero...cuando es al contrario, cuando es a esa persona lejana a la que pierdes, es muy duro, porque no tendrás la oportunidad de verla cuando se te apetezca, o de encararte con ella y dejar las cosas claras, o de darle un abrazo para que sienta que estás ahí para lo que necesite.
La distancia es una traba muy dura, que solo los fuertes pueden superar. Una traba pesada para llevarla a la espalda, y aunque te conciencies a ti mismo de que debes superarlo, las fuerzas que gastas en convencerte, las pierdes a la hora de luchar, por mucho que lo intentes.
El amor es duro, si lo tienes, atarlo es sencillo, pero es preferible conservarlo y hacerlo feliz. Pero la distancia, no puedes atarla, porque es ella quien te ata a ti.
Sé que se puede disfrutar de eso, pero a veces, debemos pensar con nuestro corazón, y sopesar que es lo que mejor le viene a él, que es no sufrir más.
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